Bienvenid@s a nuestro blog educativo. Es un placer compartir con ustedes algunas de las actividades educativas que realizamos con nuestros niños, niñas y jóvenes.
lunes, 30 de marzo de 2015
Mensaje de Jesús para ti en este tiempo de Semana Santa
Semana Santa es la semana más
intensa del Año Litúrgico, en la cual se reza y reflexiona sobre la Pasión y
Muerte y Resurrección de Cristo.
Y todo eso ¿para qué? Para que tu yo y el mundo entero
podamos ir al cielo ¡qué bueno es Dios!
Si Conocieras Como Te Amo
Tomemos unos minutos para leer la
reflexión de nuestro máximo líder el Papa Francisco
El papa Francisco se dirigió hoy, en la tradicional
misa del Domingo de Ramos, a la multitud en la Plaza de San Pedro: "el
estilo" de los cristianos debe ser la humildad, dijo. "El camino de
Cristo" no es el de "la vanidad, el orgullo y el éxito".
En esta semana, la Semana Santa que nos conduce a la Pascua seguiremos este camino de la humillación de Jesús. Y sólo así será “santa”
también para nosotros.
Veremos el desprecio de los jefes del
pueblo y sus engaños para acabar con él. Asistiremos a la traición de Judas,
uno de los Doce, que lo venderá por treinta monedas.
Veremos al Señor apresado y tratado
como un malhechor; abandonado por sus discípulos; llevado ante el Sanedrín,
condenado a muerte, azotado y ultrajado.
Escucharemos cómo Pedro, la “roca” de
los discípulos, lo negará tres veces. Oiremos los gritos de la muchedumbre,
soliviantada por los jefes, pidiendo que Barrabás quede libre y que a él lo
crucifiquen.
Veremos cómo los soldados se burlarán
de él, vestido con un manto color púrpura y coronado de espinas. Y después, a
lo largo de la vía dolorosa y a los pies de la cruz sentiremos los insultos de la gente y de los jefes, que se ríen de su condición
de Rey e Hijo de Dios.
Esta es la vía de Dios, el camino de la
humildad. Es el camino de Jesús, no hay otro. Y no hay humildad sin
humillación.
Al recorrer hasta el final este camino,
el Hijo de Dios tomó la “condición de siervo” (Flp 2, 7). En efecto, “humildad
quiere decir también servicio, significa dejar espacio a Dios negándose a uno
mismo, “despojándose”, como dice la Escritura (v. 7). Esta – este vaciarse – es
la humillación más grande.
Hay otra vía, contraria al camino de
Cristo: la mundanidad. La mundanidad nos ofrece el camino de la vanidad, del
orgullo, del éxito... Es la otra vía. El maligno se la propuso también a Jesús
durante cuarenta días en el desierto. Pero Jesús la rechazó sin dudarlo.
Y, con él, sólo con su gracia, con su
ayuda, también nosotros podemos vencer esta tentación de la vanidad, de la
mundanidad, no sólo en las grandes ocasiones, sino también en las
circunstancias ordinarias de la vida.
En esto, nos ayuda y nos conforta el
ejemplo de muchos hombres y mujeres que, en silencio y sin hacerse ver,
renuncian cada día a sí mismos para servir a los demás: un familiar enfermo, un
anciano solo, una persona con discapacidad, un sin techo...
Pensemos también en la humillación de
los que, por mantenerse fieles al Evangelio, son discriminados y sufren las
consecuencias en su propia carne.
Y pensemos en nuestros hermanos y
hermanas perseguidos por ser cristianos, los mártires de hoy – hay tantos – no
reniegan de Jesús y soportan con dignidad insultos y ultrajes. Lo siguen por su
camino. Podemos hablar en verdad de “una nube de testigos”: los mártires de hoy
(cf. Hb 12, 1).
Durante esta Semana Santa, pongámonos
también nosotros en este camino de la humildad, con tanto amor a Él, a nuestro
Señor y Salvador. El amor nos guiará y nos dará fuerza. Y, donde está él,
estaremos también nosotros (cf. Jn 12, 26).
jueves, 26 de marzo de 2015
CENTRO EDUCATIVO MADRES ESCOLAPIAS
A LOS GANADORES Y GANADORAS DE LA PRIMERA OLIMPIADA DE MATEMÁTICA
DESDE PRIMERO A OCTAVO GRADO
jijijiji. primer grado
No hay sino una regla verdadera de progreso: supérate a ti mismo
Todos los triunfos nacen cuando nos atrevemos a comenzar.